Senderismo en Andorra

El primer fin de semana de julio un grupo de 14 montañeros nos fuimos a Andorra para realizar algunas rutas senderistas que Ramón Monedero, gran montañero y amigo, nos había preparado en esas tierras.

Salimos temprano de Barbastro para poder aprovechar el día. Tras juntarnos con nuestro guía en tierras andorranas enseguida subimos hacia la zona del Estany D’Engolasters, dejando los coches en el aparcamiento, a 1640 m. Vamos a recorrer la Vall del Madriu-Perafita-Claror, declarado por la UNESCO en 2004 Patrimonio Mundial en la categoría de Paisaje Natural. Del parking sale el sendero que nos va a llevar al Coll Jovell. Este tramo corresponde al GR-11, muy accesible, sombrío y bonito, empedrado en gran parte y que se encuentra siempre muy transitado. Al comienzo hay un espectacular mirador y más adelante, un merendero.

Alcanzado el Coll, se continúa el GR y nos introduce en la Vall del Madriu. Nos llevará hasta el Refugio de Fontverd, sitio privilegiado para reponer fuerzas. Nuestro amigo Ramón ha puesto un ritmo alegre para andar y nos ganamos el descanso. Hace un día espléndido y el paisaje está rebosante de verdor y los rododendros empezando a florecer. Estamos gratamente sorprendidos.

El camino sigue y enseguida abandonamos el GR, para cruzar el Madriu (río que vierte al Valira en Escaldes) y antes de llegar al fondo del valle nos desviamos para subir hacia el Coll de la Maiana y desde allí hasta el Pico del mismo nombre, situado a 2520 m de altitud. La bajada la hacemos por otro valle de los 3 que componen el Parque Natural. Descendemos hasta el refugio de Perafita, otro paraje precioso donde comer. Desde aquí se enlaza con el Camí de Claror que va al tercer valle, pero nosotros vamos a seguir por el valle de Perafita. Este camino baja encajonado en la hondura del valle acompañado en todo momento por el ruido del agua y la visión de las impresionantes cascadas que presenta su cauce. Llegamos así al Pont de Entremesaigües donde el camino suaviza, no es tan vertiginoso y más cómodo. Terminamos el recorrido en la carretera de la Plana donde habíamos dejado un coche de enlace. Bajamos un desnivel de más de 1200 m.

Vuelta al hotel, ducha y visita a la Avenida Meritxell en Andorra la Vella, a dejarnos tentar por las compras. Después una agradable cena y el merecido descanso.

Tras un buen almuerzo el domingo, cambiamos de zona y nos dirigimos a Naturlandia, parque de animales, complejo recreativo y de multiaventura, en San Julià de Lòria. Subimos a la zona de cota 2000 donde tomamos una pista que se dirige hacia la Val de Claror. Incómodo andar por la pista, atravesamos la zona del pinar y después la dejamos para encaramarnos en los prados altos, donde teníamos amplias panorámicas hacia Andorra y Cataluña. Fuimos subiendo contemplando rebaños de vacas y alguno de caballos.

Como se hacía tarde no llegamos hasta el Coll Negre, que da paso a la Vall de Claror. A la vuelta César nos guió por el bosque, evitando la pista y a la sombra de los pinos, pues el calor era sofocante. Seguimos por una senda rebosante de flores hasta llegar al parking de Naturlandia, donde bien sentados, con mesas y sombrillas, pudimos disfrutar de la comida.

De regreso tuvimos que sufrir las interminables colas de la aduana, lo que no empañó el recuerdo de un fin de semana agradable, divertido y diferente. ¡A lo mejor tenemos que volver!. Hay muchos lugares que bien merecen una visita montañera.

fotos:

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