Raquetas de nieve por los Llanos

29 Ene, 2015 Por MAB

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Este domingo a pesar de que el mal tiempo nos invitaba a quedarnos en casa, nosotros haciendo caso omiso  nos pusimos en marcha, con la idea de inaugurar la temporada de raquetas de nieve. Cuando nos acercábamos a Benasque el viento que presenciamos era tremendo, debatimos si íbamos al Ampriu o a Llanos. Al final se decidió Ampriu…al pasar por el Molino, nos encontramos con la zona desierta, a excepción de una hilera de militares que remontaban la subida con raquetas en perfecta formación, de tal manera que parecían una raya trazada en la nieve que dividía el pasillo. Pensamos que si ellos podían, nosotros también, jajaja.

Por la carretera de acceso al Ampriu, el viento nos ofreció toda una batería de fenómenos, entre ellos un pequeño tornado que levantaba la nieve en perfecto remolino, el arrastre de la nieve por el suelo ofrecía también un buen espectáculo, asi como la nieve levantada en las crestas.

Llegamos al Ampriu y al salir del coche, la bofetada que nos dio el viento nos quito todas las esperanzas de hacer lo que teníamos previsto.

Sin dilación, volvemos al autobús con intención de probar en los Llanos, la aproximación a estos,  también tuvo su aquel,  los coches parados a media pista intentando poner las cadenas, mientras tanto nuestro autobús pasándoles sin problemas, preguntamos al chofer si llevaba ruedas de nieve y dijo que si, sin apenas pensárselo, ¿¿¿seria verdad???, jajajaja.

Comprobamos que no hacia viento, primer paso para decidirnos a ponernos las raquetas, emprendimos el camino hacia la Besurta, al ser el camino natural no tuvimos que pensar mucho, la nieve estaba esplendida, y en cuanto el sol nos empezó a dar de lleno lo agradecimos, e incluso nos quitamos alguna prenda de abrigo, del recorrido solo decir que optamos por el que sube al puerto por el GR 15, con intención de hacer la circular que va al Forau d’aigualluts y vuelve por la Besurta a los Llanos.

En este recorrido tuvimos tiempo de emplear las raquetas en todas sus fases, al principio, por el llano, las raquetas sueltas, al subir hacia el bosque, las ponemos con el alza, para facilitar la ascensión, y cuando emprendimos las bajadas, las fijamos, volviendo a soltarlas al llegar al valle.

En uno de los collados, se decide volver sobre nuestros pasos unos cien metros y bajar a la pista de ski de fondo, porque el recorrido inicial que teníamos intención de realizar se iba a alargar mucho y temíamos que se nos hiciese tarde.

A lo largo del recorrido disfrutamos del espectáculo que nos ofrecían el viento y las nubes, tras las montañas subían ráfagas de viento y moldeaban las nubes a su antojo, dándoles distintas formas, incluso algún que otro cúmulo de nubes lenticulares que reflejaban el sol y las teñía de amarillo y rosa de pronto el cielo estaba encapotado y al instante totalmente despejado, las nubes se sucedían a gran velocidad, nubes sueltas que al pasar por la zona del viento se disolvían empezando por unos agujeros como si las estuviesen perforando… En fin es, difícil de describir…. Estábamos entusiasmados con el espectáculo, las cámaras de fotos se volvían locas en nuestras manos con la prisa de ver si podíamos captar alguno de los fenómenos atmosféricos que estábamos presenciando, alguno de ellos digno de cualquier  película de ciencia ficción.

Llegamos al autobús muy contentos, porque a pesar de las perspectivas del inicio de la jornada, habíamos podido cumplir con lo previsto, aunque fuese en otro lugar.

Tras parar en Benasque para tomar algo calentito algunos y una cervecita hidratante otros, Nos pusimos en camino y llegamos a Barbastro…. muy contentos y… ya pensando en la próxima!!!!

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